Tres trucos para enfriar una cerveza en cinco minutos
Una cerveza bien fría es uno de los grandes placeres a los que se enfrenta cualquier persona, siempre que sea adulta, especialmente en los días más calurosos del año. No obstante, si la cerveza no está suficientemente fría, la sensación placentera puede convertirse casi en una odisea.
Para que esto no ocurra, os comentamos a continuación tres trucos para enfriar una cerveza en solo cinco minutos.
Usar agua, hielo y sal
Al tradicional truco de meter los botellines y latas en un barreño con hielo se le puede dar una vuelta de tuerca, y es la de añadir agua y sal. La sal derrite el hielo y esto consigue que el agua baje rápidamente de temperatura y el frío se transmite a las cervezas. Si removemos la mezcla, el hielo se derretirá más rápidamente.
Papel de cocina y servilletas
Una segunda opción para enfriar una cerveza en poco tiempo es acudir a papel de cocina, servilletas o incluso papel higiénico. El truco consiste en mojar el papel con agua y envolver la botella de cerveza con él. Tras este paso, metemos la botella en el congelador envuelta en el papel mojado y, a los pocos minutos, la cerveza ya estará fría.
Utilizar un spray boca abajo
Los dos trucos anteriores son más cómodos y fáciles de practicar, pero si queremos probar algo diferentes podemos acudir a congelar directamente la lata o la botella con un spray de aire comprimido boca abajo. De ese modo sale disparado el gas, que suele estar a temperatura bajo cero, pero sin que salga el contenido. En poco tiempo la cerveza se enfría e incluso puede llegar a congelarse, pero hay que tener cuidado y ponerse guantes, pues de lo contrario se nos pueden congelar las manos.
Hielos Mairena
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